Fracasa ‘operación cicatriz’ para unificar a grupos políticos en el interior de Morena
A cinco meses del cambio de dirigencia en Morena, los perfiles externos al grupo político del exgobernador Miguel Barbosa no han sido tomados en cuenta ni incluidos en la agenda de trabajo de la nueva presidenta del Comité Ejecutivo Estatal (CEE), Olga Romero Garci Crespo, expresaron la exalcaldesa de Puebla, Claudia Rivera Vivanco; el regidor en el ayuntamiento de la capital, Leobardo Rodríguez Juárez, así como los diputados federales Ignacio Mier Velazco y Alejandro Carvajal Hidalgo.
La expresidenta, el regidor y el diputado federal coincidieron, en entrevistas por separado, que a casi medio año de la llegada de Olga Romero a la dirigencia estatal no han recibido una invitación formal para sostener una reunión sobre los temas relacionados al partido en la entidad, lo que, desde su perspectiva, evidenció que se han registrado pocos avances de la operación que anunció la legisladora local, situación que podría desatar una lucha interna por la designación de candidaturas para el proceso electoral que tendrá lugar el siguiente año.
En tanto, el coordinador de la bancada de Morena en la Cámara de Diputados, Ignacio Mier Velazco, confirmó la falta de comunicación con la dirigencia local, pero la justificó bajo el argumento de que él se desempeña como consejero nacional y la relación que tiene constantemente es con la dirigencia nacional que encabeza Mario Delgado Carillo.
“Yo soy consejero nacional. Entonces mi relación con el CEE y el consejo estatal de Morena es marginal porque yo tengo la relación con la dirigencia nacional, no soy parte del Consejo Estatal, no tengo idea de cómo opera”, respondió al cuestionamiento de El Sol de Puebla.
No obstante, evitó mencionar si ha recibido una invitación formal por parte de la diputada local con licencia para sostener un encuentro.
Con miras al proceso electoral del 2024, el partido de izquierda realizó el 13 de agosto del 2022 la asamblea para designar al nuevo presidente de Morena en Puebla por un periodo de tres años. Tras la elección, la diputada local con licencia Olga Romero –perfil cercano al exgobernador fallecido– resultó ganadora y se convirtió en la segunda mujer al frente del CEE, después de María Luisa Albores González, titular de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales del gobierno federal.
En su primera conferencia de prensa, la líder partidista anunció una “operación cicatriz” para unificar a los diferentes grupos políticos que existen al interior de Morena. Entre los más conocidos se encuentran los afines a Rivera Vivanco, al diputado federal Ignacio Mier Velazco, a la familia Méndez y a los cercanos a Barbosa Huerta.
“Yo creo que hay tres palabras que se me hacen muy importantes: unidad, fortaleza y organización. Por supuesto de que vamos a tratar todos los grupos, no solo en Puebla capital. En todo el estado hay esa división, encontramos varias líneas de Morena”, externó en su primer mensaje ante los medios de comunicación.
A pesar de su declaración y aunque en sus redes sociales ha compartido imágenes del trabajo que realiza principalmente en los municipios del estado, no se ha observado la inclusión de perfiles externos al grupo político del exgobernador.
Referente debe ser AMLO: Claudia Rivera
La expresidenta de la ciudad externó que a pesar de la afinidad con la que pueden contar algunos integrantes de Morena, el referente del partido debe ser AMLO y uno de sus objetivos debe ser predicar con los principios de la fuerza de izquierda, que son “No mentir, no robar y no traicionar al pueblo”.
“Sin duda, unidad y fortaleza es lo que tiene que hacer la militancia de Morena. Es decir, eso es una responsabilidad que debemos tener todos los que creemos en la transformación (…) aquí hay un referente que es el presidente Andrés Manuel López Obrador”, manifestó.
Desde su perspectiva, la variedad de perfiles que son afines a diferentes corrientes al interior de Morena no es una situación negativa porque forma parte de la propia naturaleza del partido de izquierda, al contrario, puede convertirse en una fortaleza, pero, para lograr consumar ese proyecto se necesita que las personas con las riendas del partido sean capaces de identificar y respetar la diversidad que existe para posteriormente buscar un proyecto que incluya las diferentes voces.
Aunque Rivera Vivanco se dijo respetuosa de los tiempos que determinó la dirigencia para llevar a cabo la operación cicatriz, opinó que el proceso de la misma va muy lento porque el próximo año se llevarán a cabo las elecciones y detalló que hasta la publicación de este texto periodístico no ha recibido una propuesta de ningún tipo para sostener una reunión con la líder partidista.
“Yo considero de manera muy objetiva que van muy lentos en ese proceso (la unificación del partido). Esa es la estrategia, dijo bien lo que se requiere es esa operación cicatriz”, comentó.
Cuestionada sobre su interés para contender en las elecciones del próximo año, la exalcaldesa expresó que todavía no ha tomado una decisión y aún no llegan los tiempos electorales, así que pidió esperar.
Debe priorizarse el apoyo a la sociedad
Alejandro Carvajal, por su parte, informó que conoció a Olga Romero en la campaña del 2018, cuando Miguel Barbosa Huerta contendió por la gubernatura del estado y desde aquel año no ha vuelto a hablar con ella, aunque, adelantó que buscará un acercamiento con la legisladora local para proponerle algunas ideas que tiene respecto al proyecto de la 4T.
Agregó que entre los proyectos se encuentran la realización de foros de debate, una plataforma hacia el proceso electoral del 2024 y la planeación de estrategias para incluir a los jóvenes en el proyecto de izquierda con el fin de que haya perfiles para un futuro, porque al interior de la fuerza política la mayoría de personas tiene más de 30 años.
“No he tenido (ningún acercamiento con la presidenta de Morena). Yo la conocí en la campaña del 2018, con el licenciado Barbosa, pero, desde esa fecha no he podido platicar con ella. Espero tener (comunicación) poder hablar con ella y voy a presentarle algunas ideas para poder consolidar la Cuarta Transformación)”, asentó en entrevista.
Para el legislador federal es importante que los integrantes de Morena en Puebla pongan por encima de sus intereses personales los de la sociedad, debido a que gracias a ella ocupan un puesto de elección popular y tienen la obligación de buscar resolver las demandas de los ciudadanos.
Exhortó a la reflexión a sus compañeros de partido con el fin de evitar una contienda interna durante la designación de candidaturas e insistió en que los aspirantes deben ser perfiles civiles y sin mañas del viejo régimen.
“Los perfiles que compitan tienen que ser perfiles que tengan acercamiento con la sociedad civil y que no tengan vicio de los partidos del viejo régimen”, dijo.
Falta apoyo en el municipio
Leobardo Rodríguez, integrante del Cabildo en el ayuntamiento de Puebla, estimó que a nivel nacional el partido de izquierda sigue con gran presencia, sin embargo, a nivel estatal es necesaria una reestructuración tras el fallecimiento del exgobernador Miguel Barbosa Huerta, porque este era un referente de Morena, mientras que en la ciudad hace falta dar a conocer el proyecto y tener un respaldo de la dirigencia.
“La ciudad (de Puebla) es donde nos preocupa porque no vemos presencia de Morena (…) creo que sí nos ha abandonado un poco, creo que sí es importante este 2023”, expresó.
El extesorero de Rivera Vivanco opinó que hay un espacio vacío de interlocución entre la dirigencia estatal y los regidores de oposición en la capital, demarcación donde gobierna el Partido Acción Nacional (PAN).
Leobardo Rodríguez dijo que los lugares donde Morena no dirige la demarcación deberían tener mayor énfasis de trabajo con el fin de que durante el próximo proceso electoral puedan sumarse a los municipios donde el control está bajo un perfil del vino tinto.
Añadió que Olga Romero ha mostrado nulo apoyo para hacer señalamientos sobre la forma en la que gobierna el edil Eduardo Rivera Pérez y los excesos que comete.
Ahondó en que, aunque este 2023 es año preelectoral, es necesario que los perfiles con intenciones de participar en las siguientes elecciones controlen sus pasiones, así que pidió a sus compañeros esperar los tiempos que marca la ley para evitar la realización de actos anticipados de campaña o conflictos al interior de Morena.
Recordó que el próximo año se renovará la gubernatura, los 41 espacios del Congreso del estado, las diputaciones federales y los 217 ayuntamientos, además de dos senadurías, por lo que habrá una gran cantidad de espacios para los interesados en buscar un puesto de elección popular.
Sentenció que Morena no es un botín u objeto de un grupo político o un personaje, así que sus integrantes deben estar enfocados en que la lucha no sea entre los integrantes de Morena.
Previó que ganar no será tan sencillo como lo fue en el 2018, cuando únicamente por ser el candidato o candidata de izquierda se tenía casi un lugar asegurado.
Designación de Salomón Céspedes no modifica tablero
Para el coordinador de la Licenciatura en Ciencias Políticas y Administración Pública de la Ibero Puebla, Roberto Ignacio Alonso Muñoz, la designación del expresidente de la Junta de Gobierno y Coordinación Política, Sergio Salomón Céspedes Peregrina, como gobernador sustituto tras la muerte de Barbosa Huerta, no cambia de manera drástica el tablero político electoral en la entidad.
El exlíder del Congreso del estado fue el primero en anunciar públicamente su interés para la candidatura a la gubernatura. Sin embargo, luego del fallecimiento del exmandatario, el Legislativo lo nombró suplente del exsenador hasta el 13 de diciembre del 2024, fecha en la que concluiría el periodo de Barbosa Huerta.
Pese a la designación, el catedrático externó que el panorama político no cambia de manera drástica porque desde su perspectiva existen mayores probabilidades de que la candidatura recaiga en personajes locales con presencia a nivel nacional, es decir, Ignacio Mier Velazco y Alejandro Armenta Mier.
Opinó que, de acuerdo con los cálculos políticos que se realicen al interior del Palacio Nacional, podría definirse al aspirante y sería el perfil que mayor potencial de voto tenga, así como la garantía de asegurar la victoria.
“Una vez que la candidatura se defina me parece que habrá un cierre de filas porque lo que está en juego para las elecciones del 2024 es la continuidad o no del proyecto denominado 4T, esa es la narrativa que va prevalecer en Puebla”, expresó.
El catedrático de la Ibero también abordó el tema de que la oposición conformada por el PRIAN aún tiene la posibilidad de arrebatarle a Morena la gubernatura, aunque las posibilidades dependerán del desgaste con el que llegue el partido de izquierda al proceso electoral y el perfil que se elija para competir.
Sobre ese último punto hizo hincapié en que el alcalde del PAN, Eduardo Rivera Pérez, y la diputada federal del PRI, Blanca Alcalá Ruiz, son dos personas que cuentan con la experiencia de gobernar la ciudad y forman parte de los políticos mejor posicionados al interior de sus respectivas fuerzas políticas, por lo que podrían ser buenos aspirantes.
Para este texto periodístico también se buscó la postura del senador Alejandro Armenta Mier, pero hasta el cierre de la edición no se obtuvo respuesta positiva por parte de su oficina de comunicación social.